Capítulo IV: La habitación del Conejo Blanco
Página 1 de 1.
Capítulo IV: La habitación del Conejo Blanco
Capítulo IV: La habitación del Conejo Blanco
En este capítulo, tras haberse quedado nuevamente sola, Alicia ve pasar nuevamente al conejo blanco. El animal está buscando su abanico desesperadamente, y al ver a Alicia, la confunde con su criada Mary Ann, y le exige que vaya a buscar el abanico a su casa. Alicia obedece y finge ser Mary Ann, para no entrar en discusiones; y llega a una casa en cuya puerta dice "C. BLANCO". Cuando Alicia entra, sube a un cuarto donde encuentra el abanico, y otra botella con líquido. A pesar de que la botella no tenía letrero alguno, esta vez Alicia bebe por curiosidad, ya que todas las bebidas de ese mundo le han provocado efectos sorprendentes. Esta no es la excepción, y el tamaño de Alicia aumenta hasta hacerla quedar atorada dentro de la habitación. Cuando el Conejo Blanco llega a reclamar su abanico, sólo ve un enorme brazo saliendo de la ventana en el piso superior de su casa. El conejo va entonces a pedir ayuda, sin saber que el brazo pertenece a una niña gigante, y la multitud que se reúne afuera comienza a proponer varias soluciones para retirar al brazo, y llega a proponer que se prenda fuego a la casa. El capítulo termina cuando la multitud comienza a arrojar panecillos mágicos por la ventana. Alicia come algunos y disminuye de tamaño hasta poder salir de la casa. Alicia huye de la multitud y se pierde en un bosque cercano, donde se detiene frente a una seta gigante.
Temas similares
» Capítulo II: En un mar de lágrimas
» Capítulo I: El descenso por la madriguera
» Capítulo XII: La declaración de Alicia
» Capítulo X: El baile de la langosta
» Capítulo VII: Una Merienda de locos
» Capítulo I: El descenso por la madriguera
» Capítulo XII: La declaración de Alicia
» Capítulo X: El baile de la langosta
» Capítulo VII: Una Merienda de locos
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
|
|